La desinfección con ozono contra covid-19 se encuentra todavía en período de evaluación en la Unión Europea, según denuncian los profesionales que utilizan desinfectantes tradicionales, aunque las autoridades no lo prohíben expresamente y sus fabricantes defienden su eficacia.
Por su parte, la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (ANECPLA) alerta de que las desinfecciones con ozono pueden provocar efectos adversos tales como lesiones respiratorias y daño ocular.